Nightmare

Nightmare

Introducción

El cielo oscuro no dejaba ver ni un ápice de luz pese a pasar pocos minutos del mediodía. Llevaba así varias horas, de hecho no recordaba haber visto el sol desde la mañana anterior, cuando unos nubarrones de aspecto amenazador habían cubierto todo cuando abarcaba la vista, ensombreciendo su mundo. Sólo de vez en cuando, un relámpago surcaba el cielo y tenían una vaga iluminación natural. Pero incluso los rayos parecían huir de aquél lugar.

Todo parecía una pesadilla.

A su alrededor, la ciudad se abría prácticamente derruida, como si algo mucho peor a una tempestad la hubiera acometido. Las fachadas de los edificios, antes bien conservados, se encontraban ahora resquebrajados hasta lo más profundo de sus cimientos. Los cristales llenaban el suelo pavimentado, como si fuera una fina nevada tardía. Los coches estaban abandonados en cualquier lugar, puertas abiertas, llaves puestas, y equipajes en el maletero. Sin embargo no se veía a nadie, por mucho que miraran a traves de las estanterías rotas, dentro de los coches, o en las tiendas destrozadas. La soledad reinaba en aquél lugar...

Igual que en una pesadilla.

Mil y una conjeturas podían pasar por sus cabezas de no saber que había sucedido: Una revolución, un huracán, algun tipo de evacuación o cuarentena... Sin embargo todos sabían la verdad, pues aquél pequeño grupo que avanzaba unido por la avenida maltrecha, había vivido en su propia carne todo lo que había pasado. Y para recordarles que no había sido una mera pesadilla, la sangre reseca de un millar de victimas bañaba el lugar. En las paredes, en el suelo, en los semaforos y los coches... Todo en aquél grotesco escenario estaba bañado en sangre reseca por el tiempo que llevaba allí...

Igual que un mal sueño.

El grupo, ante el proseguir de la interminable avenida, permaneció en silencio absoluto. Sin nada que decir. Sin fuerzas para hablar. Temerosos de hacerlo. El verdadero miedo de las pesadillas no es el sueño en sí, sino el saber que estas desamparado mientras no puedas despertar.

¿Y si no despertaras nunca?

Peor... ¿Y si no fuera un sueño?


-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

Bueno, este es un proyecto que tenía en mente desde hacía un buen tiempo. Se podría decir que la introducción es una mera presentación, una puesta en escena. Sin embargo, es un flash forward, asi que no os extrañéis si el próximo capi empieza normal. Se que os parecera corto... pero es lo que hay. A la que empiece a describir mejor a los personajes, y pueda desarrollar bien la historia (y no solo un escenario) prometo que serán capis largos^^

Por cierto, las fichas... sí, quisiera pj, aunque es muy posible que vaya metiendolos como me salga, aun asi unas bases me ayudarían. Gracias!!!

Ficha

Nombre:
Sexo:
Edad:
Estudios y Profesion:
Personalidad: (rasgos básicos)
Datos anexos: Alguna particularidad que tiene el sujeto y merezca ser mencionado??


Solo añadir que el que se apunte deja su pj a mi merced para ser maltratado fisica y mentalmente en este fic. Muchisimas gracias!! xD

Oído cocina, Sen.
…….
¡Postapocalispis! ¡Postapocalipsis!!
¡Viva el Milenarismo!!!!

Lo siento pero me he emocionado. A medida que iba leyendo la introducción se me ha puesto la piel de gallina (no se si pk adoro la temática o porque me he acordado del “mecanoscrit del segon origen”…). Jou jou jou, me lo voy a pasar de rechupete siguiendo este fic ^^

Vamos a ver… que personaje puedo hacerme. Si, un freak estaría bien. En todo grupo postapocaliptico debe haber un freak que tenga como trabajo sacar de sus casillas a los que intentan no perder la cordura XD

Nombre: Kumo Arashino
Sexo: varón
Edad: 26
Estudios y Profesión: Licenciatura en humanidades, hace dos años que logró plaza como profesor de literatura en un instituto.
Personalidad: Taciturno, desconfiado y cabezota. Es algo sociópata, aunque tiene la extraña habilidad de que todo el mundo le hable y de llevarse bien con casi todos. Tiende a emocionarse y apasionarse a lo loco ante aquello que le gusta. Es muy autoexigente y tiene un control casi total sobre sus emociones (menos cuando se apasiona, claro…).
Datos anexos: Fan de películas de serie B, es un experto por lo que hace a los zombies (Romero poweeer!), y colecciona todo aquello que tenga relación con los no muertos y el postapocalismo: desde libros a películas pasando por comics y videojuegos (aunque no tenga la consola para poder jugarlos). Siguiendo las recomendaciones de las distintas guías de supervivencia existentes en caso de declararse una pandemia zombie, tiene una habitación de su casa donde va almacenando comida y material (Siempre respetando la ley vigente sobre posesión de armas y artículos sospechosos)… por si las moscas.
Y, que quede claro, Kumo es un freak (vamos, que la temática le gusta pero no esta tan loco como para creerse que los zombies existen). Ni un boyscaut ni un reservista militar recién llegado de Afganistán. Lo más probable es que se haga daño intentando cargar una pistola, por poner un ejemplo.

¡MOLA! Sabes que no puedo faltar en un fic tuyo, ¿verdad? Venga, ahí va mi personaje.

Nombre: Jane Darks
Sexo: femenino
Edad: 19
Estudios y Profesion: Cursa segundo curso de psicología y trabaja a tiempo parcial en una tienda de ropa.
Personalidad: Fría en apariencia, distante, aunque en realidad es más bien introvertida. Es una chica muy protectora con aquellos especiales para ella, muy callada pero siempre puede guardar un consejo útil a pesar de su corta edad, consejos que nunca utiliza ella: no es una persona que maneje muy bien sus problemas, pero sí los de los demás. A su vez es volátil, así pues se enfada con facilidad y es muy orgullosa, pero difícilmente se enfada de verdad, en esos casos es un peligro ya que enloquece y cuesta mucho calrmarla. En definitiva, es una persona muy compleja con la que es difícil tratar.
Datos anexos: Le gusta muchísimo leer, y los gatos son, tal vez sus mejores amigos (se acercan a ella sin más). Siempre lleva un collar en forma de estrella del que, por alguna razón, nunca se separa.

Nombre: Ikari Shino
Sexo: mujer
Edad: 29
Estudios y Profesion: Enfermera, cuatro años de experiencia
Personalidad: Es una persona seria y meticulosa. Tiene la sangre muy fria, aún así es buena persona. Perfeccionista hasta la exasperación.^Es la dueña de una paciencia cuasi infinita, en diez años nadie la ha visto enfadarse. Por contra partida es muy competitiva, basta que alguien le diga "no puedes" o "no seras capaz" para que su interes por hacer algo se multiplique por infinito elevado al cubo.
Datos anexos: Es miope de graduacion alta, sin sus gafas no podria ver a partir de medio metro de distancia sino manchones borrosos. Ademas, a pesar de saber pinchar a la perfeccion tiene fobia a que le pinchen a ella.

1 - Sweet Chaos Introduction

“Y cuáles son las principales características de los Haiku?” La clase entera en silencio, algunos con toda su atención en el profesor, mientras unos pocos estaban absortos en pequeños cuchicheos o mirando por la ventana “Pues para empezar no disponen de rima, y estás compuestos por 3 versos de 5, 7 y 5 versos respectivamente”

El alto profesor de jóvenes facciones se dio la vuelta de nueva, dando la espalda a sus alumnos. Apuntó esas dos características en la pizarra con una tiza algo pequeña, lo que le quedaba de las sobras de otros profesores al ser esa la última clase del día. Unas risas amortiguadas le obligaron a darse la vuelta, encontrándose con un par de chicas con el móvil en la mano, riendo.

“Hasuhara y Yagami” Les llamó la atención con suavidad, pero un tono tan imperativo que ambas chicas guardaron sus aparatos sin mediar otra palabra. En paz, y sin interrupciones acabó de escribir. “Tradicionalmente busca describir sucesos naturales, el cambio de las estaciones, o la vida cotidiana de la gente. Se encuentra muy influido por la filosofía zen, asi que era normal encontrarse con sencillez y austeridad en estos poemas”

Acabó de apuntar los cuatro rasgos principales; Rima (tachado), 3 versos de 5 – 7 – 5, sucesos cotidianos y en el último punto influencia Zen. Justo entonces sonó el timbre. Antes de que les diera permiso ya todo el mundo se había levantado, y él tampoco les reclamó protocolo. En una clase con adolescentes hormonados e impertinentes como esos, prefería desentenderse a cosechar migrañas.

“Recordad, martes tendremos examen”

Luego del aviso se fue. Quien le hubiera escuchado bien, quien no, mejor que tuviera memoria o el martes sería un mal día para él. Al salir del aula, fuera de la vista de los estudiantes, se estiró perezosamente, ese día ya había terminado, y lo agradecía muchísimo. Llevaba toda la mañana esperando su fin, pues había quedado con su novia, Mikoto, que recién volvía de su viaje al extranjero. Seis meses sin verla habían sido duros, e incluso hubo tensiones a lo largo de ese periodo, pero habían conseguido resolverlos, y se moría de ganas de verla.

Con la chica en sus pensamientos, llegó sonriendo a la zona de profesores, guardó sus cosas y miró al reloj. Las 16:45, perfecto, pues había quedado a las 18 en la estación, y tenía un trecho andando. Le sonó el teléfono en ese instante, avisándole de que había recibido un mensaje, al abrirlo vio el remitente, Sen.

“Que querrá este ahora?” Se preguntó, dándole al botón de aceptar y leerlo “Tio… deja de perseguir a tus alumnas y vente al sitio de siempre, tengo que comentarte algo importante”

Suspiró, y empezó a recitar en alto lo que escribía, con cierta lentitud.

“Se que habla la envidia, no tu jeje. Hoy no podrá ser, quede con Mikoto”

La respuesta no tardó, esta vez ponía lo siguiente: Cierto, llegaba hoy. Seguro que no puedes hacerme un hueco? Serán diez minutos. Onegaaaai ~ ~. Con un largo, y algo quejumbroso, suspiro asintió aunque no le viera su amigo. Esta bien, respondió, y se colgó la cartera en el hombro, para salir en pos de su amigo.

“Ya te vas?” Le preguntó una voz grabe y varonil. La de Igashi-sensei, el profesor de matemáticas, un hombre que pese a sus cincuenta años se mantenía en buena forma y que sonreía muy a menudo, como en ese momento “Hoy no hay correcciones?”

“No, hoy no” Le dijo amablemente Kumo “Como tendrán exámenes la semana próxima ya les di todas las correcciones para que estudiaran, asi que preveo un fin de semana muy agradable”

“Mañana hay clases, eh?” Le recordó, aunque no hiciera falta.

“Para mi sólo dos.” Le sonrió victorioso “Adoro los viernes. Bueno, se hace tarde y me esperan, nos vemos mañana.”

“Que vaya bien Arashino-sensei”

Tras la despedida ando hacia la salida del colegio, sorteando a los alumnos que se quedaban por ahí por actividades del club u otros asuntos académicos.

“Llevas paraguas?” Escuchó que decía una chica a un compañero que tenía agarrado de la mano “Porque sino podríamos compartirlo”

Sin preocuparse por la respuesta del chico, pues personalmente era de la opinión que la juventud merece aprovechar ese tiempo de irresponsabilidad y amorío pues luego la vida se vuelve bastante jodida; su mirada viajó hacia el cielo. Muy oscuro. Había estado tan oscuro durante la clase? No se había fijado. Salió al exterior y comprobó que no llovía, aunque eso sería por poco, pues en la lejanía podía ver relámpagos surcando el cielo sin cesar.


El sitio de siempre era un pequeño local, estrecho y con una capacidad para unos diez clientes máximo. Sin embargo era un restaurante de comida tradicional, y tenían como especialidad unos fideos que eran conocidísimos en toda la ciudad, por eso se formaban colas que duraban por mas de una hora muchas veces. Sin embargo, valía la pena, y ahora estaba en segundo puesto para entrar cuando abrieran, en veinte minutos.

Sen era un joven algo menor que Kumo, pues él tenía 23 y el profesor 26. De complexión fuerte y facciones simples aunque agradables, vestía un jersei oscuro pero grueso, con el motivo de un videojuego (una conocida seta verde) estampada en la espalda. Casualmente, él y Kumo se habían conocido varios años atrás, en ese mismo restaurante, que terminaron juntos en una mesa porque les habían dado plantón a los dos. De ahí que aquél restaurante fuera el punto de quedada habitual. Desde ahí hablaron y se hicieron amigos, quedando más adelante y congeniando más con el tiempo. Kumo se había vuelto para él como un hermano mayor, alguien a quien recurría cuando necesitaba apoyo moral, consejo o simplemente para pasar una tarde aburrida.

Ese día, quería comentarle algo que le hacía mucha ilusión. Al fin se había encarado contra sus sentimientos y había vencido, por lo que quería comentárselo y despedirse, en el caso que la chica en la que se había fijado le rechazase completamente.

Las luces de la calle se encendieron, sorprendiendo a más de uno, pues no se solían encender hasta un pasadas un par de horas más. Sin embargo eso le permitió fijarse en cuanto se había oscurecido el día, pues absorto, aun no lo había notado.

“Que diablos..?”

Era sumamente extraño que oscureciera de ese modo. Las nubes negras habían formado una capa que obstruía completamente el cielo, haciendo imposible de ver un solo resquicio de cielo azul. Delante de él, al otro lado de la calle, en una tienda de electrodomésticos se veía en un televisor el parte meteorológico. Al parecer, las nubes ocupaban toda la prefectura… no! Todo el país!! Sería alguna clase de tormenta? Lamentablemente no podía escucharlo, y si salía de la fila ganaría una hora y media más de cola, pues ésta era larga a su espalda.

“Sen!!”

Una voz a sus espaldas le llamó la atención. Y le hizo girarse. Ahí llegaba Kumo con su larga chaqueta cubriéndole hasta medio muslo. Las manos en los bolsillos le protegían del frío.

“Kumo!! Llegas tarde” Le riñó con una sonrisa mordaz “Tuviste que castigar a alguna niña?”

“Sí, a tu hermana, y disfrutó de lo lindo”

Sonrió aun más mordaz que él, victorioso. Al fin y al cabo los roles que habían formado con el tiempo en esa amistad eran así, él con la última palabra y dejando a menudo a Sen en ridículo. Aun así, el joven le seguía picando a veces, consiguiéndolo más a menudo cada vez. Eran como hermanos.

“Le pediré los detalles, tranquilo” Le respondió, zanjando el tema.

“Que tienes que decirme que no puedes esperar a mañana?” Inquirió, en el fondo con cierta curiosidad. Se imaginaba la temática, sin duda algo sobre algun cromosoma XX, pero sus historias siempre le hacían reír “Chicas?”

“En verdad sí” Respondió, sonrojándose un poco.

“Lo temía” Suspiró “Sólo hablas de eso”

“Claro” Le reprochó “Cómo tu tienes novia no te preocupa eso, pero a mi si”

“Pos échate una”

“Eso quiero!! Y… a eso iba… tengo un objetivo”

“Y que, te dará calabazas?”

“Eres de gran apoyo, lo sabías Kumo?”

“Hago lo que puedo” Respondió con un tono claro de sarcasmo “Quien es ella?”

“Aun no se su nombre, pero la vi el otro dia cuando fui a comprarme esta sudadera en la tienda nueva, esa de ropa fashion y demás… no me acuerdo del nombre”

“Es pijilla entonces?”

“No!! Al menos no me lo pareció” Se llevó una mano a la barbilla, pensativo “La verdad es que era muy mona, así bajita. Pero me llamaron mucho la atención sus ojos… eran de un castaño precioso”

“No te pongas empalagoso, lo odio”

“Tendría que darte una paliza” Si lo hiciera, algo que decía solo en broma, seguramente lo conseguiria, pues aunque el profesor era más alto que él, Sen tenía mucha más fuerza. “Enserio, no entiendo como te cuesta tanto ayudarme!!”

“Si te echo un cable… demasiado a menudo y todo. Cada semana estas igual, y luego cuando te queda el corazón hecho trizas tengo que animarte yo”

“Y siempre te lo agradezco, no? O me dirás que no vas al cine gratis?”

Sen estudiaba audiovisuales, y aunque su sueño era hacer alguna película que llegara a tener cierto renombre, trabajaba a tiempo parcial en un cine del barrio, con lo que tenía libertades en ese sentido.

“Sí… pero eso de ir al cine gratis sólo a aumentado la frecuencia en que veo películas de estreno… y he de confesarte que la mayoría son una basura, asi que tampoco hay tanto que agradecer”

“Vete a paseo” Le repuso. Aunque sabía que Kumo hablaba en broma, no podía evitar que le sacara de sus casillas. Suspiró, y le miró de nuevo. “Me acompañarás?”

“A la tienda de ropa?”

“Sí”

“No”

“Porque?”

“Porque he quedado con mi novia en menos de una hora y quiero verla. Han pasado seis meses desde la última vez!!”

“Entonces no estas tan mal, yo hace mucho más que no mojo”

“Imbécil.. ya sabes a que me refería” Aun su reproche Kumo rió abiertamente.

“Te viene de camino, esta a tres manzanas.”

“Uhmm…” Sabía que negarse sería imposible, porque tendría a Sen pegado a él insistiéndole, y le seguiría hasta la cita para convencerle a él y a Mikoto para que le acompañaran. Asi que optó por lo directo, acompañarle y que le dejara en paz. “Esta bien, vamos”

“Arigatoooo!!” Dijo dando un buen grito victorioso, seguido luego por una reverencia de gratitud. Entonces se puso a andar junto a Kumo por la calle, torciendo a la derecha. “Por aquí…”



No se sabe cómo ni porqué, pero algo pasó esa tarde. De pronto, sin aviso previo ni nada, todo dejó de tener sentido. Todo tenía un aura ensombrecido, algo que nadie percibió por culpa las nubes, pero de no haber estado estas se habrían dado cuenta de que todo cuanto tenía materia, estaba ensombrecido, apagado. Aunque no se percataran de eso, un dato anecdótico que tampoco les daría la razón de todo aquello, si fue el primero de los extraños acontecimientos de ése dia y los que estuvieron por venir. Aun lúgubre… aquello no era nada por lo que preocuparse realmente, nada al menos, comparado con lo que les deparaba el por venir.


Hablando mientras andaban, camino a la tienda de ropa, un coche deportivo pasó peligrosamente veloz por su lado, arremetiéndoles con una ráfaga de aire que les despeinó.

“Maldito loco!!” Chilló Sen enfadado.

Imposible que le oyera, pero no pudo contenerse. Sin embargo el enfado desapareció de repente cuando escuchó el sonido chirriante de los frenos, el del metal chocando con fuerza contra algo de mayor resistencia y una explosión casi inmediata. Delante de ellos, el coche había derrapado y se había estrellado contra un muro, estallando después en una gran bola de fuego. Ante ellos, se desataba el infierno… y no por las llamas precisamente.


-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

Voy cumpliendo, eh??? xDDD

Espero que os guste, ya sabéis, criticas y demás, estoy encantado de oirlas^^

Eh eh eh eh eh!

Ni tiempo me has dado a hacer mi ficha...pero que es esto de venir pegando fuerte? Te me has emocionao Sen...


Madre mia...con este fic....cualquiera diría que hoy tuviste un mal dia xD

bueno, aun a riego de que mi personaje sea maltratado (apiadate de mi, que soy una monjita) aquí va la ficha



Nombre: Laria Bloth

Edad: 22

Estudios y profesion: ¿estudios? educacion religiosa en un convento desde los 12 (y antes en colegios femeninos de la misma indole) Actualmente hizo sus votos como monja y se dedica a atender a los menos favorecidos en un centro donde se da comida a los indigentes.

Personalidad: Activa y con determinación. Tiene una fuerte fé en dios que no es minada por ningún desastre o tragedia. Como toda buena monja es compasiva, cordial y amable y como toda buena monja vieja... se le va la mano con facilidad, sacando una regla de madera de dios sabe donde (nunca mejor dicho) para poner en orden al personal. Pese a sus votos se enamora con facilidad, lo que supone un gran dilema para ella.

Datos anexos: Nadie sabe a ciencia cierta su aspecto, aparte del rostro, la altura y que es de piel blanca, el resto queda cubierto por el traje siempre



Ale, fastidiaté, a ver como introduces ese personaje en tu fic (eso te pasa por no esperar mi ficha antes de empezar a escribir *te saco la lengua*)

Muy… apetitoso.
Presentación de dos personajes (seguramente el tándem protagonista… o no), describiendo la pacífica, vulgar y aburrida vida del día a día. Y, en medio de la cotidianidad que todos pueden conocer, inclusión gradual de un fenómeno extraño al que nadie, siempre ajetreados, presta atención.
La gradual subida de tensión está muy bien encontrada, así como el progresivo dominio de una sombra persistente (¿soy yo o esto huele a umbras? Si es así me alegro, porque los adoro ^^ ). Quizás, casi al final, el ritmo marcado se acelera de forma artificial y brusca, señal que querías terminar el primer capi, pero de forma apresurada, para deleitarnos con tu nuevo fic y crear adictos. Cosa, que, por cierto, lograste.

Venga, a escribir o mañana, en nombre de todos los que tienen mono de fic (pose de sailor moon), te castigaré.
XD

Me gustó, sí sí. Oh dios, me lo parece a mí ¿o la chica en la que se ha fijado Sen soy yo?
En cuanto a lo demás, introduces la tensión gradualmente de una forma muy lograda. A í ya has conseguido engancharme y ya tengo mono de más. Empiezas pisando fuerte y eso te da muchos puntos. A ver qué hay de esas nubes, el accidente y todo lo que está por venir.

Estoy de acuerdo con las opiniones anteriores, me ha encantado y me ha mantenido pegada leyendo. Lo que me pregunto es si lo vere llegar al final o después del cuarto capítulo te desinflarás como de costumbre....

Ahi flagelando!!! xDDD

Pues lo más seguro es que continue pronto, de hecho ya tengo pensado cosas. Dea sera la proxima en salir, como ha supuesto me refiero a ella. Misato, tu pj me va perfecto, oh yeah xDD Pero tu y enac tardareis un poco más en salir... un par de capis o asi... vuestra entrada sera más apocalyptica xD

Tontolabas... Encima de nada que te pican un poco desvelas cosas sobre el fic... Puaj

A ver si conseguimos mantener un poco mas en secreto lo que va apasar que si no no tiene gracia ^^. No dejes que tu boca te traicione kuyki

Creo que no hay nada más que pueda decirte que no te hayan dicho ya...

No habré llegado tarde... ¿verdad?

Nombre: Yuuki Wakatsuki

Sexo: Femenino

Edad: 23

Estudios y Profesion: Recién licenciada en medicina. Actualmente en prácticas mientras se saca el doctorado...

Personalidad: Alegre y positiva. Tiene mucha facilidad para entablar nuevas amistades, aunque también a confiar demasiado en todo el mundo, sea quien sea. Se preocupa mucho por la gente y hará siempre lo que esté en su mano para ayudar. Tiene una increíble capacidad para animar a la gente y mantener siempre cálido el ambinte de su alrededor.

Datos anexos: Suele tener la tensión baja, por lo que su personalidad es completamente distinta por las mañanas, al despertarse.


Ánimo y sigue pronto!!! >¬<

nya nya! ya llego!! xDD

Nombre:Luna
Sexo:Femenino
Edad:18
Estudios y Profesion:Artes,estudiante.
Personalidad: algo callada pero alegre. Tiene cierto aire serio y extravagante .Le cuesta expresar lo que siente aunque nunca lo parezca.Es cariñosa,valiente y muchas veces se queda pensando en a saber que cosas .
Datos anexos:por la noche tiene mas energia que a lo largo del dia.

Espero que te sirva ^^

Siento la tardanza!!! He tenido problemas con la conexión, además de mucho curro en las clases. Pos como prometí, sigo con el fic, aunque este capitulo se me alargó y no pude introducir tantos como habría querido.

Tengo un par de dudas, y borré casi todo el capitulo cuando ya lo estaba acabando, porque no me gustaba como quedaba. Espero que ahora, como esta, tenga más coherencia y os guste (algo inútil de comentar porque no sabréis como era antes, pero ahi lo dejo xDDDDD)

Ya sabeis, criticas y demás, que me gusta ver donde puedo mejorar^^



2 - The Beginning of the End

La calle parecía surgida de una película de terror, como si de hubiera desatado una pesadilla macabra en aquél lugar. El deportivo que casi les había arrollado segundos antes se había llevado por delante un dispensador de gasolina, que había terminado estallando junto la estación entera cuando el coche se incendió. Las llamas lamían todo el lugar, ahí donde habían prendido. Gente chillaba horrorizada, envuelta en llamas, mientras a sus pies gente inerte ardía lentamente, haciendo nada para evitarlo. Posiblemente estarían ya muertos. Sin embargo, eso sólo ocupó su mirada unos instantes, desplazándose después hacia la verdadera pesadilla…

“Que coño…”

Ese fue Sen, con la vista clavada a las criaturas. No había mejor forma para definirlas, porque… no podían ser zombies, no existían, verdad? Aun así cualquier lógica había desaparecido. No había lugar para la razón en ese momento.

Cuerpos otrora inertes, con heridas sangrantes por doquier, miradas vacías y muertas, corrían por la calle, aullando, rugiendo y babeando como salvajes. Sus mandíbulas rezumaban saliva y sangre por igual, fluidos tanto suyos como de inocentes, que poco a poco iban cayendo y reviviendo cuando les arrancaban la carne a mordiscos. Una chica corría, huyendo horrorizada, cuando dos de esos seres la alcanzaron, tirándola al suelo con un estrépito sonido sordo. Sus dientes se clavaron en el cuello y pierna de ella, que se debatía inútilmente en un intento de zafarse de sus predadores. Inútil… calló al fin cuando le arrancaron la garganta, y se ahogó con su sangre.

“Que es esto..?” Kumo lo miró horrorizado, como si no pudiera creer lo que veían sus ojos. Ni todo lo que había leido en sus libros, ni lo que había visto en sus películas favoritas, había podido prepararle para lo que era eso, un banquete fúnebre y macabro.

Sin pensárselo, Sen arrancó a correr hacia aquél lugar, pero un Kumo rápido de reflejos le cogió del brazo antes de que hubiera avanzado demasiado, frenándolo en seco. Sus miradas, asustadas, se encontraron.

“Que crees que haces?” Inquirió el mayor.

“Ir a por ella…” Se zafó del agarre de su amigo y sin que le pudieran detener de nuevo corrió hacia un pequeño local, de ancho escaparate hecho añicos, y se metió dentro sin pensárselo un segundo. No hacía falta pensar para entenderlo, ahí dentro debería estar su chica. Masculló, miró una vez más la sangrienta realidad que le rodeaba y echó a correr tras su amigo.

Ahí dentro la perspectiva no era mucho mejor. La ropa esparcida por el suelo parecía formar una extraña moqueta de colores y texturas muy distintas, pero la sangre era lo que realmente llamaba la atención. Verdes, amarillos, cueros y plásticos estaban bañados de sangre por doquier. La reciente explosión había afectado a la corriente, por lo que muchas luces se encendían y apagaban intermitentemente, enseñando fugazmente el tétrico panorama que había en la tienda. No sólo de sangre estaba manchada la ropa, sino también, al parecer, de algo muy parecido a tripas humanas. Sen pisó las vísceras sin pudor, más preocupado por su chica que por la materia organica que pudiera quedar en sus zapatos. Kumo lo alcanzó rápido y se puso a su altura, oteando también a su alrededor.

“La has visto?” Preguntó el mayor, dirigiendo su mirada al mostrador. La caja registradora abierta le resultó atractiva un instante, pero como buen experto en el tema supo que le dinero poco le serviría en un momento como aquél.

“No…”

“NOOOOO!!!”

Otra voz repitió lo que dijo el joven, sólo que su tono fue de terror desesperante. Una puerta en la que no habían reparado, sumida en la oscuridad del fondo de la tienda, se abrió con un golpe sordo, y salió una muchacha, bajita y de pelo cortito, justo como Sen había descrito. Sin embargo, detrás de ella había otros dos hombres, ninguno de los cuales parecía realmente humano. Uno de ellos agarró a la chica de la ropa, desgarrándola cuando ella se zafó con fuerza. El torso desnudo salvo por el sujetador fue tentador… por su compañero, que hincó sus dientes en el cuello de ella y tiró desgarrando la carne con facilidad. Las lágrimas de ella se fundieron con su propia sangre y la saliva de la criatura.

“Julia!!!”

Sen saltó hacia delante, dispuesto a salvar a la chica, que agonizaba en el suelo, en un terrible espasmo mortal. Los ojos se desvanecían ante su mirada. Cogió un perchero que había en el suelo, por su peso seguramente de acero inoxidable y arremetió contra la primera criatura, dándole un fuerte golpe en la cabeza que sonó exactamente como cuando se parte una sandia. Cayó pesadamente al suelo, y Sen se iba a dar la vuelta cuando se encontró que el otro zombie, por llamarlo de algún modo, se abalanzaba hacia él. Interpuso su improvisada arma entre él y la criatura, usándola como escudo, evitando asi que se acercara demasiado, cuando Kumo hizo su estelar aparición arrojándole la caja registradora a la cabeza. Con un sonoro ruido metálico, la caja cayó al suelo, esparciendo un sinfín de billetes junto al cadáver, al fin inerte.

“Julia!!”

Repitió Sen lanzándose a por la muchacha, yéndole a comprobar el pulso. No tenía, o al menos eso creyó en el poco tiempo que tuvo para comprobarlo, pues algo que pasó rozándole peligrosamente a alta velocidad fue a estrellarse en la cabeza de ella, reventándola como una fruta madura. Sen quedó atónito, duchado por la sangre de la chica que quería. A su lado, Kumo empuñaba el mismo perchero que había usado él antes.

“Se iba a volver uno de ellos” Fue la respuesta de Kumo a la mirada de intenso odio e incomprensión que le lanzó su amigo “Lo sabes”

“Que se yo!! No se nada!! Y tu tampoco!!” Le chilló, furioso, recuperando de nuevo el habla tras los segundos sin recordar como se usaba, conmocionado “No sabes que esta pasando aquí!! No actúes como si lo supieras!!”

“Tu mismo lo viste ahí fuera” Le respondió, defendiéndose de las acusaciones con tranquilidad, demasiada incluso. Parecía que ni él mismo entendiera lo que estaba sucediendo.

“Eso no es excusa!! La mataste!!”

“Ya estaba muerta!! O me dirás que tenía pulso?”

“Yo…” Dudó un instante, pero enseguida recobró fuerza en su voz “Ni siquiera me diste tiempo a comprobarlo!!”

“Hubieras preferido terminar como ella?” Le reprochó el profesor, subiendo también la voz, para hacerse escuchar. No entendía que pasaba, ni el porqué pasaba, pero lo que si sabía era que no podían mantener un comportamiento moral… en una situación inhumana, la moralidad lleva a la muerte. Y él no pensaba morir, al menos no tan pronto.

“No habría terminado como ella!! No estaba muerta!!”

“Lo estaba y lo sabes” Le dijo él, apelando a al raciocinio. No debían retrasarse más ahí, no era seguro “Debemos irnos”

“Porqué?”

“Porqué no estamos en un lugar seguro, somos muy vulnerable…”

“No” Fue un corte contundente, al fin se puso en pie, recobrando fuerzas. Le cogió de la chaqueta “PORQUE LA MATASTE!!!”

“PORQUE ELLA TE HUBIERA MATADO A TI!! ACÉPTALO!!” Le apartó la mano del cuello de su chaqueta, pero no le empujó, no iba a entrar en una pelea sólo para que Sen pudiera desahogar toda la rabia que llevaba encima “Ahora, marchémonos..”

“No te importa un comino haberla matado, verdad?” Sus ojos miraban al suelo, lloraba. Su mano siguió agarrando fuerte el brazo de su amigo.

“Te recuerdo que mi novia esta también ahí fuera?” Eso pareció repercutir algo en el joven, por lo que alzó la mirada, brillante por las lágrimas, y le miró a Kumo directo a los ojos “Vamos. También me gustaría tener la oportunidad de salvar a mi chica”

“…”

No pudo responder, simplemente dejó su agarre y asintió. A diferencia de Kumo, que sabía mantener la cabeza fría y pensar analíticamente, Sen era un chico muy impulsivo y temperamental, que cualquier emoción le abrumaba hasta el punto de reaccionar de cualquier manera. En ese instante, apenas podía ni andar.

Un golpe súbito, de madera contra piedra, les alertó. Era una de las puertas de los probadores, había caído al suelo, maltrecha, y revelaba otras dos figuras en su interior.

Si te referías a mí, ya me has matado, pero no es mi personaje ya que el mío se llama Jane, así que... no era yo (lo cambiaste xD). Si me matas así de golpe, tu personaje en mi fic no durará más de dos capítulos xD

Nah, nah, que ha estado muy bien y me ha gustado bastante. Me hizo mucha gracia lo de la caja registradora, bueno... especialmente cuando es arrojada a cabezas xDD

Veamos, la historia engancha, se nota que tu forma de narrar mejora, estoy contenta casi del todo con tu fic, aunque va leeento T.T quiero maaaas, se que no debería quejarme de esto, pero así es la vida ^^U

Se nota que has mejorado en eso de narrar!
Así que al final la chica de la tienda no era Deamar! xD
Por un momento dudé y tuve que volver a mirar el nombre de la ficha, por la descripción física y tal xDD

Y ahora la duda...
¿Quiénes serán las dos personas del probador...? Y... ¿¡Qué hacían DOS personas en UN probador!? xDD

Ánimo y sigue pronto!!! >¬<

Esto no son zombies ¬¬
Los zombies no corren, solo corren ladrones y jamaicanos (que, si no voy mal, son los que ahora ostentan todos los records de velocistas, no?). Si Romero alzara se pasara por aquí, seguro que te daría un buen tirón de orejas.

Peeeeeeero, no deja de ser un magnifico y perturbador capítulo. Caos, confusión y la moralidad por los suelos al segundo capítulo. Mola ^^
Por cierto, me juego dos céntimos que las nuevas figuras están vivas, lo que es más, mínima una es del grupo (siempre es…. “divertido” ver que, cuando en películas de terror salen dos amigos/amigas o una pareja, siempre uno de los dos muere a la media hora), solo es cuestión de adivinar de quien se trata.

*misato comienza a caminar lentamente hacia la puerta, disminuyendo su marcha para girar la cabeza y mirar a sen* eh.....aun estoy a tiempo de retirarme? una monja mojigata no creo que dure mucho en un fic con zombis...*repelus* detesto los zombis > . < me dan muy mal rollito....todo menos eso!!! > . <


pero bueno! aparte de mi queja...la lectura ha sido estupenda, aunque por cierto....cuando shishio se carga a "tu chica" yo por lo menos le había estampado la caja registradora en la cabeza a él (que seguro que la tenias a mano) pero tu no te preocupes que aquí estoy yo para aliviar las almas abatidas y rezar por ti xDDD


desde luego....tu narracion es estupenda....tendré que currarme mi fic, o no me sentiré a la altura xDDD


Nota: no sabes la sensación de asquito que da leer el fic con tanta masacre, visceras y sangre por doquier (sobretodo si tienes una imaginación tan desbordante como la mia) mientras cenas....te planteas si seguir leyendo y dejar de comer, o acabar de comer y leer el fic (yo opté por la segunda)